jueves, 30 de junio de 2016

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8 escritores que sufrieron trastornos mentales y no sabías

Todos tenemos permitido un poco de locura. Y si no, siempre podemos romper con los estigmas. Más o menos así ha sido el camino de una cultura como la nuestra, en la que los locos se han comprendido poco a poco, sobre todo en el campo del arte y la literatura. Las distintas formas de percibir la realidad –y de estar en contacto con ella– han pasado incluso por el cliché de ser propias o características de la mente creativa.


Cuando hablamos de intelectos y talentos espectaculares, tampoco podemos omitir que hemos sobreexplotado, incluso mitificado, la completa existencia de alguien; como si un diagnóstico clínico explicara íntegramente a un sujeto, el cual lo único que pudo hacer fue vivir la vida como mejor pudo en conjunción con su arte.
Por eso hay que tener cuidado al analizar a un artista desde sus condiciones de salud o de integridad. Cierto, ¿hasta qué punto llega el hombre y hasta qué otro el creador en su obra? Pero vanagloriar o condenar su producción sólo por sus torturas, desgastes y quiebres mentales es uno de los desatinos más grandes en el mundo.


Escritores con trastornos

En un caso extremo especial, podemos pensar en los artistas de la palabra escrita como ese ejemplo perfecto de la creatividad que, si bien no se pudo disociar de su trastorno, tampoco dependió de ello. Para muestra, es casi seguro que alguno de la siguiente lista será un descubrimiento y nunca se necesitó del todo esa información para estudiar o comprender su génesis.

Edgar Allan Poe

Escritores con trastornos - Poe
Se cree que además de sus problemas con el alcohol, el máximo padre del Romanticismo y la novela detectivesca sufrió de un terrible desorden bipolar. A lo largo de su vida tuvo varios signos maníacos y esto abre la posibilidad de una persona contrariada hasta en su más mínima decisión.

León Tolstói

Escritores con trastornos - Tolstoi
El amo y señor del Realismo ruso tampoco estuvo exento de sufrir las consecuencias de su contexto histórico y personal. Tolstói vivió una profunda depresión durante años y su obra se hizo entrecomilladamente presa de su sentir.

Virginia Woolf

Escritores con trastornos - Woolf
La autora de “Mrs. Dalloway” ha sido estudiada por años tanto por su obra como por su vida; se ha supuesto en repetidas ocasiones que sufría una depresión maníaca, pero tampoco se ha podido descartar el padecimiento de una esquizofrenia poco atendida o comprometida.

Ernest Hemingway

Escritores con trastornos - Hemingway
Con antecedentes psiquiátricos en la familia, Hemingway presentó a lo largo de su vida cuadros bipolares mientras sostenía su adicción al alcohol; el autor también fue el causante de violencia, abusos e inseguridades para aquellos que le rodearon.

El matrimonio Fitzgerald

Escritores con trastornos - Fitzgerald
Tan peculiar su relación como sus trabajos literarios, Scott y Zelda vivieron una turbulencia de emociones dadas por la adicción de él por el alcohol y la inestabilidad obsesiva de ella. El autor de “El gran Gatsby” murió de un ataque al corazón mientras que Zelda falleció en una terapia de electroshock a causa de una bipolaridad mal diagnosticada (se pensó que tenía esquizofrenia).

Sylvia Plath

Escritores con trastornos - Plath
Víctima de una depresión suicida, Sylvia siempre trató de huir de las consecuencias que tenía su pesar; en su trabajo es rastreable la inquietud por el término de la infelicidad o el hallazgo de nuevas rutas para su superación. Fue hasta febrero de 1963 que decidió meter su cabeza en el horno y terminar su sufrimiento con gas.

Philip K. Dick

Escritores con trastornos - Philip K Dick
Este prolífico escritor de sci-fi, antes de ser un escándalo en sí mismo por el uso excesivo de drogas y estimulantes durante la década de los 70, ya contaba con rasgos esquizoides en su vida. Cierto, murió de un infarto probablemente por el abuso de sustancias en su cuerpo, pero fueron sus padecimientos los que le llevaron a ese uso y a esas experimentaciones.

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