En la actualidad resulta cada vez más difícil entregar nuestro corazón sin salir lastimado. Lo supieron bien las mujeres de Pablo Picasso (quien era un infiel recurrente), la pintora mexicana Frida Kahlo (a la que Diego Rivera la engañó con su hermana) o la actriz de cine Mia Farrow cuando descubrió que su exmarido, el cineasta Woody Allen, mantenía relaciones incestuosas con su hija adoptiva. Justo cuando creemos que todo es perfecto, que por fin hemos encontrado a la persona largamente anhelada y que ésta nos corresponde, sobreviene la súbita pérdida, el adiós que no veíamos venir. El golpe nos lleva a la tristeza y la depresión.
Sin embargo, hay historias llenas de tragedia que nos hacen ver que nuestra situación está muy lejos de ser lo peor que nos haya pasado. Estos relatos los encontramos en célebres novelas de autores de diversas épocas y tendencias que exploran las heridas del amor de una manera profunda. De esa forma nos regalan un momento de catarsis donde nos percatamos que la experiencia de nuestro corazón roto es menor en comparación a lo vivido por sus protagonistas.
Es una forma de sanar las heridas mediante la terapia de la lectura. Conoce las historias que nos hacen ver que en el amor las cosas siempre pueden ser peor…
“La dama de las camelias” (1848) – Alejandro Dumas (hijo)
La historia de la cortesana Margarite Gautier ha cautivado el corazón de muchos lectores a lo largo de los años con sus aventuras amorosas en el París del siglo XIX. Esta mujer despertó la pasión de su amante, Armando Duval, quien quedó flechado por la cortesana desde el primer instante en que la vio, a pesar de conocer su modelo de vida. Ambos sostienen un tórrido romance, como pocas veces se ha visto en la literatura. Su autor escribió esta novela inspirado por un hecho real acontecido en su vida: el romance que sostuvo con la cortesana Marie Duplessis, lo cual le confiere más impacto y sentimiento a la obra. Imperdible.
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“La tregua” (1959) – Mario Benedetti
Cuando cierras este libro lo único que atinas a hacer es quedarte un buen número de horas derruido pensando en la soledad de su protagonista: un hombre a punto de jubilarse, gris, melancólico que de pronto encuentra el amor en los brazos de una mujer más joven que él. El romance sostenido entre el narrador de la historia, Martín Santomé, y Laura Avellaneda se percibe lleno de pureza, de una inocencia bellísima que se acentúa por el hecho de tratarse de un hombre mayor que descubre la emoción del primer flechazo. Exquisita novela de un autor que elevó la literatura de Latinoamérica a lo más alto.
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“Rayuela” (1963) – Julio Cortázar
La novela que revolucionó la literatura latinoamericana en 1963 contiene el amor turbulento y apasionado de La Maga y Oliveira, el cual tocó el corazón de miles de lectores alrededor del mundo. “Andábamos sin buscarnos, pero sabiendo que andábamos para encontrarnos” es una de las frases memorables que resume el romance entre sus protagonistas: dos seres que se investigan mutuamente en búsqueda de las formas definitivas del amor que los une. Novela experimental donde se vierten todas las obsesiones de su autor de manera magistral.
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“Cumbres borrascosas” (1847) – Emily Brontë
El clásico drama de una de las hermanas Brontë que aún es tan vigente como en el momento de su publicación. Cuenta la tormentosa historia de Catherine Earnshaw y su amado Heathcliff. Una relación marcada por la tragedia del destino que te hará sentir una herida en el interior difícil de superar. En esta novela se ejemplifica de manera perfecta lo que significa el amor a primera vista y cómo sobrevive a lo largo de los años, pese a las desventuras de sus protagonistas. De ambiente gótico y desolador, es una lectura obligada para cualquier amante de la literatura clásica.
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“Hablando del asunto” (1991) – Julian Barnes
¿Qué preferirías? ¿Ser engañado por tu mujer con tu mejor amigo o ser el amigo que destruye una relación? Para el autor, ambas situaciones son igual de dolorosas. ¿Qué opinas? Cada página es un descubrimiento de los sinsabores del amor. Deliciosa lectura que se goza y sufre a partes iguales.
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“Tokio blues” (1987) – Haruki Murakami
La novela que catapultó a Murakami para convertirse en el autor predilecto de los jóvenes japoneses. Esta novela es un himno al amor jamás consolidado y las contradicciones de la amistad. Toru Watanabe es un joven estudiante de literatura cuyo corazón ama a dos mujeres: la atormentada Naoko y la atrevida Midori. Las dos se volverán mujeres definitivas que lo dejarán marcado el resto de su vida. Watanabe pronto se verá envuelto en una historia apasionada marcada por la tragedia de la muerte. Un libro lleno de melancolía y nostalgia.
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“El búfalo de la noche” (1999) – Guillermo Arriaga
Otra novela sobre un triángulo amoroso lleno de complejidades y sentimientos tormentosos. Gregorio decide terminar con su vida y desata los sentimientos de culpa en su exnovia Tania y su mejor amigo Manuel. Celos, culpas y traición son los ingredientes principales de esta trama cargada de intensidad.
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“Una pena en observación” (1961) – C.S. Lewis
Tras la muerte de su esposa debido a una larga enfermedad, Lewis reflexiona en torno a la soledad y el sentimiento de pérdida. Con esta lectura echarás de menos a la persona amada y sentirás la soledad en todo su apogeo. Nada es infinito, ésa es una de las grandes tragedias de nuestra existencia y en esta obra se hace patente. Las reflexiones del autor versan sobre los hechos más sencillos de la vida cotidiana, que ahora tiene que pasar en soledad, y también sobre diversas preguntas acerca de su fe en Dios.
Creo que les falto un clásico como lo es Madame Bovary
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