Esto es serio. Por más que parezca un mal chiste o una exageración completamente millennial, la crisis del cuarto de siglo existe; es un estado conflictivo por el que mucha gente de nuestra generación atraviesa y debe ser considerado con total formalidad. Desde los años 90, la psicología y demás especialistas del pensamiento humano han aceptado el término como un medio para reconocer a esa etapa de cambios en la que cualquier persona puede perder un poco de piso por encontrarse en los veintitantos. Un episodio caracterizado, a grandes rasgos, por la indecisión, las ansias ante un futuro endeble, la inexplicable nostalgia del colegio, la terrible apatía por las finanzas, la necesidad irracional de amor, el más grande miedo al fracaso, el absoluto aburrimiento y la sensación de reventar a cada instante.
¿A qué se lo debemos? Pocas respuestas hemos tenido; los grandes sospechosos son, obviamente, los medios electrónicos, la manera como se desarrollan nuestras relaciones interpersonales, la competitividad que exige hoy el campo laboral y la urgencia por una vida tremendamente estética. Elementos contemporáneos nada fáciles de combatir; sin embargo, a manera de receta anticaos, nos queda el consuelo de que podemos trabajar los efectos negativos de dichos ejes diabólicos recordando sencillamente que la vida no es una carrera, que puedes convertirte en quien tú decidas, que las expectativas deben relajarse de vez en cuando, que nunca se está de verdad solo y que la vida siempre es mejor leyendo.
Que nada ni nadie se interponga entre un libro y tú; que las páginas se conviertan en tus mejores aliadas. Porque la lectura salva días y noches, también podemos decir que la literatura crea todo lo que alguna vez soñamos y hace de este mundo un lugar más soportable.
¿Con qué libros, entonces, superaremos este infierno?
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“White Teeth” (2000) de Zadie Smith
“Nunca se es tan fuerte… más que en ese momento donde aterrizas al otro lado de la desesperación” es una de las líneas más fuertes de esta novela que retrata al multiculturalismo de nuestra época con la vida de dos hombres amigos en Londres. Todo un viaje social y moral en letras.
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“La historia de mis dientes” (2013) de Valeria Luiselli
Como si tuviéramos un objeto de arte contemporáneo o un experimento editorial en las manos, este libro de la mexicana que narra la vida de un poeta y diplomático mexicano en Nueva York: Gilberto Owen. Con sátira, jocosidad, textos en japonés, mucha imaginación y letras rayando en la perfección, el presente título lo vale todo.
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“Not That Kind of Girl” (2014) de Lena Dunham
“Este libro contiene historias sobre maravillosas noches con chicos terribles chicos, y terribles días con amigos maravillosos, sobre la ambición y las dos crisis existenciales que tuve antes de los 20 años, sobre la moda y sus muchos sinsabores, sobre compartir públicamente tu cuerpo, teniendo que probarte a ti mismo en una reunión llena de hombres de 50 años de edad, y los temores de salud (tinnitus, lamp dust, infertilidad) que me quitan el sueño”. LD
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“Finale” (2016) de Thomas Mallon
Según el Washington Post y el Wall Street Journal, un libro alucinante que narra sobre los límites de la ambición humana, además de una ficcionalización tremenda sobre una época histórica que repercutió directamente en nuestra generación: la de Reagan y su presidencia dudosa. Irrealidad y crítica se desbordan a cada página.
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“The Last Days of New Paris” (2016) de China Miéville
Un thriller de tintes surrealistas y tenebrosos que coloca al París que todos conocemos en una situación de extrema fantasía donde los hechos históricos se derriten en la sonoridad de las palabras ficticias. Con amplio conocimiento en el arte y la política europea, China sigue con lealtad las mismas palabras que escribió en este libro: “La belleza será convulsiva”.
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“Sentimentalismo tóxico” (2016) de Theodore Dalrymple
Al hilo de su perspicaz y en ocasiones incómodo comentario de temas sociales, políticos, populares y literarios de muy diversa naturaleza, Dalrymple nos muestra las consecuencias perversas que tiene abandonar la lógica en favor del culto a los sentimientos. El cual, resumidamente, destruye el sentido de la responsabilidad y aumentando la violencia en nuestro tiempo.
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“Versiones de nosotros” (2015) de Laura Barnett
“Laura Barnett explora en esta novela original y cautivadora la fragilidad de los hechos que van configurando nuestras vidas, cómo hay momentos en los que la vida puede deslizarse por un sendero en lugar de otro dependiendo sólo de pequeños factores o de decisiones que adoptemos en un determinado instante. Y lo hace a través de la historia de amor de una pareja, que crece o se desvanece en función de los derroteros de la vida. El amor que es y el que pudo ser”. Alianza
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“Levantarse otra vez a una hora decente” (2014) de Joshua Ferris
Vivir en la contradicción es un hábito y este libro nos los restriega en la cara. Odiar las redes y no despegarse del iPhone, ser ateo pero no renunciar a Dios, desear una mejor existencia y fumar como si no hubiera un mañana, percatarse que alguien te suplanta en la web y hasta tuitea en tu nombre. Todo eso es novelizado exquisitamente por Ferris es un delirio contemporáneo del que todos somos parte.
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“Results May Vary” (2016) de Bethany Chase
“Esta última novela de Chase será de interés para cualquier persona que alguna vez se haya dado cuenta de que ella misma se define por aquellos que le rodean. El autodescubrimiento de Caroline es familiar; sin embargo, Chase tiene una especial habilidad de fraseo y un enfoque reflexivo que empuja a este corte por encima de los demás… Una buena opción para los amantes de Emily Giffin y Kristin Hannah”. Booklist
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“La luna no está” (2013) de Nathan Filer
La vida puede cambiar vertiginosamente en pocos segundos. Eso lo sabe el autor y el protagonista de esta historia, Matthew Holmes, quien encarna a un joven que nunca podrá olvidar su terrible pasado y que vive encerrado en sí mismo. ¿Encontrará fuerzas para volver a empezar algún día? ¿Alguno de nosotros podrá eventualmente?
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