sábado, 20 de agosto de 2016

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Libros que sólo entiendes cuando eres una persona madura

Cuando Virginia Woolf se llenó los bolsillos de piedras para sumergirse en el río Ouse, estaba en la plenitud de su madurez literaria. Tenía casi sesenta años. La madurez como lectores, por otra parte, no llega a una edad determinada: los libros siempre llegan a nuestra vida en el momento adecuado. Hay ciertas lecturas que están destinadas a enaltecer nuestra condición de jóvenes, dentro de la cual no es raro encontrar desinterés hacia los grandes temas y preocupaciones del mundo real, es decir, el mundo adulto.

Luego crecemos, pasamos la barrera de los 30 y nos encontramos con obras, por otro lado, cuyo propósito es volcar nuestra mirada sobre cuestiones fundamentales de la realidad contemporánea: en los libros que revisaremos, autores como Roxane Gay, Virginia Woolf, Richard Yates, Ralph Ellison y J. M. Coetzee persiguen una sensibilidad mucho mas compleja en la que intervienen temas como el feminismo, el suicidio, la catástrofe de un hombre y el racismo.


“Bad Feminist” (2014) – Roxane Gay


Libro de ensayos en el que Roxane Gay explora la imperfección, ese sentimiento de fallar como mujer y como feminista: nadar en un mar de contradicciones. Los ensayos que integran la obra demuestran, con una sinceridad luminosa, cómo es vivir en un mundo en el que el idealismo feminista es insostenible. Gay admite haber sucumbido ante el machismo inmerso en nuestra cultura al incurrir en faltas que cualquiera pasaría por alto como haber bailado canciones como “Blurred Lines”, de Robin Thicke, que rebaja a las mujeres escandalosamente. El libro habla sobre la presión de ser perfecta dentro de los márgenes del feminismo, cuyas reglas, según Roxane, si bien son distintas a las del patriarcado, pueden llegar a ser igual de estrictas e ineficaces. Su crítica más dura al feminismo sucede cuando afirma que no es tan inclusivo como promete, pues no considera a mujeres de color, queer y trans. Una mirada dura y nada complaciente a uno de los temas que, en ocasiones, la juventud se apropia sin hacer antes una revisión crítica.





“Mrs. Dalloway” (1925) –  Virginia Woolf



Todo tiene lugar en un solo día de junio de 1923. Escrito como una respuesta al “Ulises”, de James Joyce, este libro está escrito desde la voz individual de cada personaje. Explora temas como la represión sexual y económica que sufren las mujeres, y lo ilustra con la dependencia económica que tiene respecto de su aburrido esposo, con el que está a pesar de soñar con Peter Walsh, su amor de juventud sin consumar. La locura también tiene un rol importante dentro del libro y del propio universo personal de la autora: el personaje de Septimus, que sufre una inestabilidad mental heredada de la guerra, se suicida al igual que Woolf, quien interpretaba la práctica suicida como una muestra de esfuerzo por mantener la pureza de la felicidad. Una manera compleja de entender el suicidio, sin juicios morales de por medio.



“Revolutionary Road”  (1961) – Richard Yates



Ambientada en 1955, trata sobre una pareja que vive en un suburbio y padece problemas maritales que van en incremento. Deciden huir a París buscando un futuro mejor, y al llegar allá, ella trabaja para sostenerlos a ambos. Frank, el esposo, se aburre luego de un rato, ella se embaraza por tercera vez y tienen que volver a Estados Unidos. A Frank es alabado y respetado en el trabajo, motivo por el cual la llegada del nuevo hijo le resulta provechosa y cada vez se acostumbra más a la vida de oficina. Uno de los primeros libros en plantear el trabajo como una vía de escape del mundo, razonamiento bajo el cual pasar todo el día en la oficina equivaldría a consumir algún tipo de droga. La vida de trabajador como refugio para el alma y sus devastadoras consecuencias. 






 “The Invisible Man” (1952) – Ralph Ellison



En este libro encontramos preocupaciones de tipo social e intelectual que asaltaban a la población afroamericana de Estados Unidos a principios del siglo XX. Narrado desde una primera persona anónima que jura ser invisible, plantea un “nacionalismo negro” que, en su época, fue un hecho literario sin precedentes. La invisibilidad es una metáfora de la ceguera que la sociedad se ha impuesto al ignorar al otro, a la condición de individuo de un tercero. Con el auge del movimiento #BlackLivesMatter, una relectura a esta obra no caería mal.




“Disgrace” (1999) – J. M. Coetzee


Una especie de libro de Job contemporáneo. David Lurie, el personaje principal, es un académico tres veces divorciado que, luego de intentar contactar con una prostituta que ha decidido dejar el trabajo y recuperar su vida, comienza a tener un affair con una de sus alumnas. El nombre de ella es Melanie y él la obliga a tener relaciones sexuales, motivo por el cual ella huye de la escuela y se queda sin trabajo. Luego Lurie se muda al campo. Allí sufre un asalto que desemboca en la violación de su hija por parte de los ladrones. La catástrofe de un hombre no es perder la batería de su smartphone: hay cosas mucho peores.

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