Las librerías no son tiendas normales. Esas en las que uno entra,
ojea el género con prisas y lo adquiere o se da la vuelta y se va con
las manos vacías, echando un vistazo nervioso el reloj digital del
móvil. Las librerías han vuelto a su origen, es decir, a lo próximo, y
todas tienen su personalidad, incompatibles con la frialdad serializada
de las franquicias. Entrar en una librería es dejar en la calle la
vorágine, la ansiedad de las pantallas, para crear un momento de pausa.
Una a una son diminutas, invisibles. Todas juntas -más teatros,
auditorios y cines- forman la red de cultura más extensa del mundo, como
si fueran el esqueleto físico, papel, ladrillo y contacto humano, que
sostiene el edificio Cultura. Hoy casi 4.000 librerías celebrarán su día
y algunas -sólo las que formn parte de la red Cegal- lo harán abriendo
hasta las 22 horas y con descuentos del 5 %. Proponemos algunos títulos
para quien quiera aprovechar la ocasión.
Confidencias sobre mujeres, padres e hijos
Elisabeth Strout. Me llamo Lucy Barton (Duomo y Edicions de 1984). A veces cuando queremos hablar con nuestra hija o nuestra madre ya se han levantado demasiadas barreras, inercias o ausencias para el entendimiento.
Peter Petterson. Salír a robar caballos (Libros del Asteroide y Club Editor). La vida en el bosque,la presencia de los animales, el despertar de la conciencia ante unos hechos llenos de guerra y amor, esa calma que precede a las grandes tempestades.
Para los amantes de la Historia
Noel Malcom. Agentes del imperio (Galaxia Gutenberg). Caballeros, corsarios, jesuitas y espías en el siglo XVI. Casi un libro de aventuras.
Robert Gildea. Combatientes en la sombra (Taurus). La historia de la resistencia francesa, contada con una exhaustiva documentación y numerosos aspectos desconocidos y sorprendentes.Tan sorprendente como las revelaciones del periodista Norman Ohler en E l gran delirio. Hitler, drogas y el Tercer Reich (Crítica) sobre el uso de drogas en los ejércitos nazis.
Para quienes creen que vivimos en las puertas de la sociedad postmasculina
Chimamanda Ngozi Adichie. Todos deberíamos ser feministas ( Mondadori ). Recoge un discurso sobre lo que significa ser feminista en el siglo XXI. Ser feminista -dice- no es sólo cosa de mujeres.
Anne Sexton . Un autorretrato en cartas (Linteo). Es el libro de una poeta, pero en las cartas se desvelan sentimientos, vivencias, pensamientos íntimos que no suelen ponerse por escrito, ni siquiera por medio de la ficción.
Para quienes quieren explicarse por qué el mundo está tan convulso
Antonio Ariño y Juan Romero, La secesión de los ricos (Galaxia Gutenberg). Esto libro no se lee como una novela. Está repleto de datos para explicar cómo se ha llegado a la desigualdad, al empobrecimiento de la democracia, al clima de incertidumbre, inseguridad y repliegue de las sociedades sobre sí mismas.
Chantal delsol. Populismos ((Ariel). José Luis Villacañas. Populismo (La Huerta Grande). Dos libros para el debate sobre los fenómenos Trump, Le Pen, Farage. Cómo nuestras democracias, anquilosadas al no renovarse, favorecen movimientos retrógrados que la ponen en peligro, ayudadas por intelectuales, encuestadores y políticos que demuestran no conocer el país en el que viven. Refrescarse con las teorías de Moiss Saim,El fin del poder (Debate)
Para lectores sentimentales
Angelika Schrobsdorf. Tu no eres como las otras madres (Asteroide y LaCampana). Vivían radiantes, plenos de vida y de planes, los felices años veinte hasta que todo cambió con la llegada de los nazis. Una historia real que va más allá de la contada por Irene Nemirovski.
Marion Fayolle. La ternura de las piedras. Libro ilustrado, tragicomedia de humor negro y poesía visual.
No hay comentarios:
Publicar un comentario