Hay muchos estudios sobre la importancia de la lectura en los niños, y también en los adultos. Pero en los más pequeños de la casa es de una gran relevancia el hábito de la lectura, ya que cuanto más lean, mejor redactarán, comprenderán mejor el lenguaje y el significado de los textos, su comprensión será mayor y desarrollarán la imaginación, algo fundamental para la inteligencia. Pues por si todo esto fuera poco para habituar a nuestros hijos a leer, un estudio reciente de la universidad de Padua, nos dice que los niños lectores, cuando se hagan adultos tendrán un sueldo más elevado frente a los que no lo son.
Los tres economistas de dicho estudio son, Giorgio Brunello, Guglielmo Weber y Christoph Weis, ellos estudiaron a 6000 hombres nacidos en distintos países de Europa, entre los años 1926-1956 y llegaron a la conclusión de que los niños que habían crecido con acceso a libros habían ganado más dinero, que los que crecieron con pocos o ningún libro en su hogar. Según los datos de esa investigación, estos hombres tuvieron unos ingresos un 9% superiores a la media. Para ellos fue un impacto el ver que los hombres y mujeres criados en hogares con muchos libros ganasen un 21% más, además de tener más oportunidades de trabajo.
Un hogar lleno de libros indica unas condiciones socioeconómicos más ventajosas. ¿Por qué creen estos tres investigadores, que puede ser tan determinante los libros en los hogares? Porque leer ayuda a una comprensión cognitiva y emocional muy grande, y estos conocimientos que no son académicos, son el resultado de hombres y mujeres con mayor futuro en el mundo laboral.
Particularmente no planteo que el éxito o la felicidad vayan unidos al dinero, y no es algo que yo inculque a los jóvenes que me rodean, pero si creo que leer además de poder dar mayor oportunidades laborales a los niños de hoy, les hace crecer de una manera más plena, empatizar mejor con otras culturas, y sobre todo convertirse en adultos que piensan por ellos mismos. Mantener a los niños al alcance de los libros, es una máxima importante que los adultos nos debemos aplicar. Como decía Cicerón: Un hogar sin libros es como un cuerpo sin alma.
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