9 razones por las cuales es bueno leer diario

Si eres una de esas personas que consideran que no vale la pena dedicar un momento del día para enamorarte de las letras y llenarte de conocimientos nuevos, te estas perdiendo de mucho. Aquí van algunas razones por las cuales deberías dedicarle un tiempo en tu día a día a la lectura.

 

Estimula tu mente

Leer estimula la actividad neuronal; es la manera más rápida y fácil de mantener activado lo que muchos consideran el órgano más importante del cuerpo. Nuestro cerebro requiere que lo ejercitemos diariamente para mantenerlo con la vitalidad con la que nos lo entregaron. Hay estudios que demuestran que estimular constantemente nuestra mente por medio de la lectura, puede detener el progreso y hasta prevenir enfermedades como el Alzheimer y la demencia.

Reduce el estrés

Cuando te sumerges en el mundo de las palabras, todo el estrés acumulado en el trabajo, las relaciones personales o los incontables problemas a los que te enfrentas día a día quedan en segundo plano. Hay autores y obras maestras que logran transportarnos a universos totalmente desconocidos en los que el presente sólo eres tú y las palabras que se deslizan frente a tus ojos. Deja que las tensiones abandonen tu cuerpo y que la belleza de un buen libro tome su lugar.

 

Amplia tu vocabulario

Mientras más leas, más amplio será tu léxico. Cada palabra tiene un significado único y hay millones de ellas listas para ser descubiertas. Tener un vocabulario extenso y hacer un buen uso del poder de la palabra es indispensable en cualquier profesión, además de ser un bonus en nuestra autoestima.

Leer también es una herramienta esencial en el aprendizaje de un nuevo idioma, la exposición constante a palabras ajenas a nosotros va a generar una importante base para hablar y entender un segundo lenguaje. 

Entrena y mejora la memoria

Entre personajes, hechos y escenarios, mientras leemos tenemos que recordarlo todo. Puede parecer mucho, pero nuestro cerebro tiene millones de neuronas con la capacidad de almacenar cantidades enormes de datos, lo único que debemos hacer es entrenarla. Por si no fuera lo suficientemente increíble, cada nueva memoria o recuerdo que creamos genera nuevas vías cerebrales o alarga las ya existentes, educando a la memoria a corto plazo y estabilizando nuestros complejos estados de ánimo y humores.

 

Conlleva a un pasamiento más analítico

Leer es pensar. ¿Alguna vez has leído una novela de misterio y logrado resolver el caso antes de terminarla? O tal vez mientras lees sobre química o física de pronto conectas los puntos y entiendes, ambos casos prueban un pensamiento analítico esencial a la hora de leer.

Aún mejor, si este pensamiento se estimula de manera colectiva, compartir opiniones y pensamientos con un grupo de personas que tuvo la oportunidad de leer la misma obra es una excelente manera de salir del pensamiento que a ratos se vuelve único en nuestra mente, asó podrás experimentar con distintas opiniones y visiones.

 

Mejora el enfoque y la concentración

En un lapso de 5 minutos, la persona promedio divide su tiempo entre la tarea principal que realiza, checar correos electrónicos, platicar con distintas personas y todo sin despegar ojo del celular; nos hemos vuelto multitasking. Lo que pocos saben es que esto es un tipo de comportamiento asociado al déficit de atención y lejos de ayudarnos, baja nuestra productividad y aumenta el estrés.

Un libro obliga a tu cerebro a concentrarse sólo en eso: en la historia. El resto del mundo se detiene y eres tú y las palabras que pasan por tus ojos. Intenta leer 20 o 15 minutos antes de ir al trabajo o a la escuela y te sorprenderá lo fácil que te concentrarás después de eso.

Mayor habilidad al escribir

Con un vocabulario más extenso, una mejor concentración y un pensamiento más analítico sería difícil que no mejoraras tus habilidades al escribir. De la misma forma en la que los artistas se inspiran de maestros previos o técnicas establecidas anteriormente los escritores aprenden leyendo los trabajos de otros. Así como Juan Rulfo se inspiró con las obras de James Joyce o Marcel Proust y García Márquez admiraba a Franz Kafka tú puedes empaparte del talento de otros hasta encontrar tu propia voz en las palabras.

 

Tranquilidad

Además de la relajación que experimentamos al leer un buen libro, es posible que la historia o un personaje en particular cree en ti un sentimiento de paz interior. Indagar en textos espirituales, por ejemplo, ayuda a bajar la presión en sangre, mientras los libros de autoayuda han probado ser se gran ayuda para aquellos que sufren de cambios de humor drásticos o enfermedades mentales apacibles.

 

Entretenimiento de bajo costo

Aunque la mayoría piense lo contrario, no es necesario gastar dinero para leer un buen libro, no importa cuál sea. Las librerías públicas nos proporcionan catálogos inmensos llenos de obras de arte listas para ser devoradas. Desde historias macabras hasta libros que narran la historia de una nación, puedes encontrar de todo, sólo es cuestión de querer hacerlo. 

Ve por un libro y dale a tu mente un respiro de la cotidianidad, sumérgete en una historia que te envuelva y te haga pensar y cuestionar el día a día. Disfruta de la maravilla de la palabra y de las grandes obras que han creado maestros desde Voltaire hasta Isabel Allende.




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